El Crimen Perfecto Capítulo 3: La Noche del Robo

 Capítulo 3: La Noche del Robo

La ciudad dormía bajo la luz de las estrellas, pero Richard y ZeroCool estaban muy despiertos. El edificio parecía una fortaleza, sus ventanas cerradas como ojos fríos. Las luces de la ciudad reflejaban en las paredes, creando sombras que parecían moverse por sí mismas.

Para Richard, el tiempo parecía ralentizarse. Cada segundo contaba, cada movimiento era crucial. Pero para ZeroCool, esto era solo otro desafío, otro juego de estrategia. "¿Qué sabes que no estoy diciendo?" le preguntó Richard, tratando de leer entre líneas.

Richard se rió amargamente. "Bueno, supongo que esto cambia mis planes de jubilación temprana", dijo, tratando de mantener la calma. ZeroCool asintió con una sonrisa, pero Richard notó una ligera tensión en su voz.

Con movimientos rápidos y precisos, Richard se dirigió hacia la entrada del edificio. Insertó su herramienta de acceso en la ranura y esperó con el aliento suspendido. La puerta cedió lentamente, permitiéndoles pasar a un pasillo oscuro y silencioso
.

El tiempo parecía detenerse mientras esperaban la respuesta del sistema. La habitación estaba en silencio, excepto por el suave
 zumbido de los dispositivos electrónicos y el jadeo constante d Richard. ZeroCool trabajó con una precisión que parecía casi
 sobrehumana. Sus dedos volaban sobre el teclado, ingresando códigos y comandos con una velocidad que Richard apenas podía
 seguir.

De repente, Richard escuchó un ruido extraño proveniente de la computadora. Se dirigió hacia allí y encontró un mensaje de
 advertencia que decía: "No confíes en ZeroCool". La pantalla se oscureció y luego reapareció con un mensaje de error. "Acceso
 denegado", leyó Richard horrorizado. "¿Qué ha pasado?"

ZeroCool miró hacia arriba, sus ojos brillando con sorpresa. "Lo siento, Richard. Parece que mi cuenta ha sido bloqueada por
 seguridad".

Richard sentía como si estuviera caminando hacia la muerte. Cada paso que daban lo acercaba más al éxito o al fracaso total. "
¿Estoy realmente haciendo lo correcto?" se preguntó, mirando hacia la ciudad. "¿Vale la pena arriesgarlo todo por cincuenta
 millones de dólares?"

El tiempo parecía detenerse mientras esperaban la respuesta del sistema.

 La habitación estaba en silencio, excepto por el suave
 zumbido de los dispositivos electrónicos. Richard sentó en la silla, con los ojos fijos en la pantalla del ordenador. La
 noche estaba llena de posibilidades y peligros. Richard Langley se preparaba para enfrentarlos todos, pero esta vez sin ZeroCool como su aliado.

¿Podrían encontrar una manera de superar este obstáculo? ¿O todo lo que habían planeado durante meses iba terminar en fracaso?
 Solo el tiempo lo diría. Pero Richard sabía que no podía dar marcha atrás ahora. Tenía que seguir adelante, por mucho que temiera lo que podría suceder.

La habitación estaba en penumbra, iluminada solo por la luz tenue de las estrellas que entraba a través de la ventana. El aire
 acondicionado mantenía la temperatura perfecta, pero Richard notó que sudor secaba rápidamente debido al nerviosismo. Cada minuto que pasaba parecía una eternidad.

Richard miró hacia ZeroCool, tratando de leer en su rostro. ¿Qué estaba tramando? ¿Estaba buscando una excusa para desertar?

De repente, Richard escuchó un ruido extraño proveniente del pasillo. Se dirigió hacia allí y encontró a un guardia de
 seguridad mirándolo fijamente. "¿Qué estás haciendo aquí?" le preguntó el hombre, su voz firme pero con un tono de curiosidad
.

Richard se preguntó qué tipo de personas podrían estar detrás de la decisión de bloquear la cuenta de ZeroCool. ¿Alguna
 organización secreta? ¿Un rival empresarial?

El tiempo parecía detenerse mientras esperaban la respuesta del guardia. La habitación estaba en silencio, excepto por el suave
 zumbido de los dispositivos electrónicos. Richard sentó en la silla, con los ojos fijos en la pantalla del ordenador. La
 noche estaba llena de posibilidades y peligros. Richard Langley se preparaba para enfrentarlos todos, pero esta vez sin ZeroCool como su aliado y con un guardia de seguridad mirándolo directamente.

¿Podrían encontrar una manera de superar este obstáculo? ¿O todo lo que habían planeado durante meses iba terminar en fracaso?
 Solo el tiempo lo diría.

 

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Autor: kyrub