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EL RETORNO DEL LEVIATÁN: EL PACTO HISTÓRICO QUE DEJA A EUROPA SIN EXCUSAS. 💣

Yo lo tengo que decir: hemos presenciado el verdadero fin de la paz económica como dogma fundacional de Europa. 🤯 Desde 1945, la identidad de Alemania ha sido la de la nación que se hizo a sí misma a través de la vergüenza y el Détente; la gran potencia que prometió no levantar nunca más una espada. Su fuerza era el euro, no el cañón. Pero la historia, esa gata traviesa, ha regresado por donde se fue. Este movimiento, impulsado por una legislación que pone a la juventud en el radar de la defensa nacional, no es solo un reajuste militar. Es una sentencia cultural que obliga a todo el continente a mirar su propia sombra.

Nosotros hemos analizado la data. Después de suspender el servicio militar obligatorio en 2011, la dotación activa de la Bundeswehr se había estancado cerca de los 180,000 efectivos. Hoy, el Canciller ha sido explícito: el objetivo es construir el "ejército convencional más fuerte de Europa", buscando elevar la cifra a más de 260,000 soldados activos y hasta 200,000 reservistas, respaldado por un fondo de 100 mil millones de euros. La ley actual, que obliga a los hombres jóvenes a registrarse y someterse a un examen médico (y permite una llamada a filas en caso de necesidad), es el puente de hierro que une la era del pacifismo con la de la guerra-lista (Kriegstüchtig).

El origen de este giro no es táctico, sino existencial. Durante décadas, Alemania operó bajo la premisa de la No-Capacidad, externalizando su seguridad a la OTAN (léase, Estados Unidos) y enfocando su energía en la exportación. Este modelo generó prosperidad, pero también una profunda deuda militar con sus aliados, al gastar consistentemente menos del 2% del PIB en defensa. La invasión de Ucrania y la incertidumbre geopolítica con respecto a Washington han demolido ese pacto tácito.

Esta es la Ley de la Causa-Efecto Ineludible. Cuando la seguridad geopolítica desaparece, el trauma histórico regresa. La nueva legislación, aunque todavía se apoya fuertemente en el voluntariado, ha establecido el mecanismo legal (la encuesta obligatoria para los hombres de 18 años) para activar la conciencia de defensa en una generación que nunca la conoció. La lógica obliga a que una nación demográficamente grande y económicamente dominante, asuma el rol que le corresponde en la geografía: el de un muro protector ante la amenaza oriental.

Se ha comprendido que todo el proceso ha girado en torno a la Reciprocidad. Para sus vecinos del este, una Alemania fuerte es una garantía. Para sus vecinos occidentales, es un socio necesario y, tal vez, una fuente de nueva tensión. El acto de rearme no es una opción; es un imperativo funcional que nace del vacío de poder continental. La creación de este ejército, entonces, no es un regreso a la hegemonía, sino la única vía para evitar el colapso de la estructura defensiva europea.

La construcción de este poder ha sido, es y será un acto de voluntad sobre la ingenuidad histórica.